donde se prohibe expresamente el fraccionamiento
El fraccionamiento de los contratos está prohibido expresamente para evitar eludir los requisitos de publicidad y los procedimientos de adjudicación establecidos en la Ley de Contratos del Sector Público.
El fraccionamiento se refiere a la práctica de dividir un contrato en partes más pequeñas con el fin de evitar los umbrales que obligan a seguir procedimientos más estrictos y transparentes. Esta práctica va en contra de los principios de transparencia, igualdad y libre competencia que rigen la contratación pública.
La prohibición del fraccionamiento busca asegurar que los contratos sean adjudicados de manera justa y que se garantice la mejor relación calidad-precio para el sector público. Al evitar el fraccionamiento, se promueve la competencia entre los proveedores y se asegura que los procedimientos de contratación sean abiertos y accesibles para todas las empresas interesadas.