¿un contrato de alquiler de vehículos es de servicios o de suministros?
Un contrato de alquiler de vehículos se clasificaría como un contrato de suministro.
Los contratos de suministro, según la Ley de Contratos del Sector Público, incluyen aquellos que tienen por objeto el arrendamiento, con o sin opción de compra, de productos o bienes muebles. Esto abarca una amplia gama de bienes, incluidos los vehículos, siempre que estos sean considerados bienes muebles. Por lo tanto, un contrato por el cual se alquila un vehículo para su uso por parte de una entidad pública se encuadra dentro de esta categoría.
Por otro lado, los contratos de servicios se definen como aquellos cuyo objeto son prestaciones de hacer, orientadas al desarrollo de una actividad o a la obtención de un resultado específico, distinto de una obra o suministro. Dado que el alquiler de vehículos no implica una prestación de hacer dirigida a obtener un resultado específico distinto de la provisión del bien en sí, no se clasificaría como un contrato de servicios.
En resumen, el alquiler de vehículos para entidades públicas se considera un contrato de suministro, ya que se centra en la provisión de bienes muebles (los vehículos) en lugar de en la realización de una actividad o servicio específico.