Se puede aplicar un proceso abierto simplificado en lugar de un abierto simplificado abreviado, aun siendo el importe adecuado para aplicar el abreviado

Sí, se puede aplicar un procedimiento abierto simplificado en lugar de un abierto simplificado abreviado, incluso si el importe es adecuado para el abreviado.

El procedimiento abierto simplificado y el simplificado abreviado son modalidades del procedimiento abierto que buscan agilizar la tramitación de contratos públicos. Aunque el simplificado abreviado está diseñado para contratos de menor cuantía, no hay impedimento para que un órgano de contratación opte por utilizar el procedimiento abierto simplificado, siempre que se cumplan las condiciones establecidas para su aplicación.

El procedimiento abierto simplificado puede aplicarse a contratos de obras, suministros y servicios, siempre que el valor estimado no supere ciertos umbrales económicos. Además, debe cumplirse que los criterios de adjudicación no incluyan juicios de valor, o si los incluyen, su ponderación no debe superar un porcentaje específico del total.

Por otro lado, el procedimiento simplificado abreviado está destinado a contratos de menor cuantía, con umbrales más bajos, y ofrece una tramitación aún más ágil, con menos requisitos documentales y plazos más cortos. No obstante, la elección entre uno y otro procedimiento puede depender de las necesidades específicas del órgano de contratación y de la naturaleza del contrato.