Cómo calcular la baja temeraria
La baja temeraria es una figura prevista en el artículo 135 de la Ley de Contratos del Sector Público de España, que establece que el contratista puede ser declarado responsable de los daños y perjuicios causados al órgano contratante si incumple de forma temeraria sus obligaciones contractuales.
Para calcular la baja temeraria, el órgano contratante debe evaluar la conducta del contratista para determinar si ha actuado de forma temeraria. Esto se realiza mediante un análisis de los hechos y circunstancias que rodean el incumplimiento, como la gravedad de la infracción, el grado de negligencia o la intención del contratista.
En caso de que el órgano contratante determine que el contratista ha actuado de forma temeraria, debe calcular el daño y perjuicio causado por el incumplimiento. Esto se realiza mediante el cálculo de los costes directos e indirectos ocasionados por el incumplimiento, como los gastos de reparación, los costes de reemplazo o los intereses de demora.
En resumen, para calcular la baja temeraria, el órgano contratante debe evaluar la conducta del contratista para determinar si ha actuado de forma temeraria y, en caso afirmativo, calcular el daño y perjuicio causado por el incumplimiento.