la fiscalizacion será plena o de requisitos esenciales

La fiscalización de los contratos en el sector público puede ser plena o centrarse en los requisitos esenciales, dependiendo de las circunstancias específicas del contrato.

La fiscalización plena implica un control exhaustivo de todas las fases del contrato, desde su adjudicación hasta su ejecución y finalización. Este tipo de fiscalización se realiza para garantizar que se cumplan los principios de transparencia, eficacia y honestidad en la contratación pública. Se lleva a cabo en varios momentos clave, como dentro de los tres meses siguientes a la formalización del contrato, cuando el precio de adjudicación excede ciertas cuantías, o cuando se producen modificaciones, prórrogas o variaciones de precio y plazos.

Por otro lado, la fiscalización de requisitos esenciales se centra en verificar que se cumplen los aspectos fundamentales del contrato, como la solvencia económica, financiera y técnica de los licitadores, así como el cumplimiento de las disposiciones legales y normativas aplicables. Este tipo de fiscalización es más selectiva y se enfoca en los elementos críticos que pueden afectar la validez o ejecución del contrato.

La elección entre una fiscalización plena o de requisitos esenciales puede depender de factores como la cuantía del contrato, su complejidad, y la naturaleza del servicio u obra contratada. En algunos casos, debido a la pérdida de efectivos en las Administraciones Públicas y la necesidad de una fiscalización más eficiente, se busca un equilibrio que permita un control efectivo sin ralentizar los procesos administrativos.

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